¿Cómo se mide la pobreza?

Uno de los indicadores más usados para medir la evolución del bienestar es el nivel de pobreza de un país. De acuerdo con cifras oficiales, el porcentaje de pobres en el Perú ascendió a 21.77% en 2015, luego de ubicarse en 27.82% en 2011.  ¿Qué significan estos números y cómo se llegó a ellos, es decir, cómo se mide la pobreza?

Si queremos medir la pobreza antes debemos definirla, asunto que constituye una tarea compleja (intente conversar con amigos, pregunte qué es pobreza y notará la falta de acuerdo). Suponiendo que ya la definió, medirla es aún más difícil. El problema es que al no existir una única definición de “qué es ser pobre”, tampoco habrá solo un método para calcularla. Entonces, ¿qué método se utiliza para calcular la pobreza “oficial” en el Perú?

En el Perú se usa el método de “líneas de la pobreza monetaria”. El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) define la pobreza monetaria (también llamada por ingresos) como la insuficiencia de recursos monetarios para adquirir una canasta de consumo mínima aceptable socialmente. En términos simples, pobre es          aquel que no tiene el dinero para comprar la canasta mencionada.

Una línea de la pobreza es un límite o umbral, que indica el costo (expresado en unidades monetarias) de la canasta mencionada. Aquellos cuya capacidad de gasto es menor que la línea son considerados pobres; por el contrario los que pueden gastar un monto mayor que el indicado por la línea son considerados no pobres. En otras palabras, la línea de la pobreza divide a la población en dos grupos: pobres y no pobres.

De esta manera, la pobreza se mide en función de una variable: la capacidad de gasto de la persona, con lo cual se asume que si tiene el dinero, entonces lo gastará en aquellos bienes y servicios que eleven al máximo su bienestar. Por lo tanto, si todas las personas recibieran una transferencia de dinero que les permitiera gastar por encima del costo de la canasta mínima, entonces no habría pobres. La pobreza monetaria mide la posesión del medio para lograr el fin.

¿Así es la realidad? La pobreza es un fenómeno multidimensional, que no depende solo de la capacidad de gasto de una persona, más allá de los problemas que tiene la definición de la canasta de consumo mínima socialmente aceptable. Por ejemplo, una familia puede tener el ingreso para comprar la canasta que lo clasifica como no pobre, pero vive en condiciones de hacinamiento, sin agua ni desagüe, sin energía eléctrica y en una vivienda precaria. A todas luces, también sería pobre, a pesar que con el método descrito aparecería como no pobre. Esa observación nos lleva a otro método, conocido como el de las necesidades básicas insatisfechas (NBI). En este segundo método se listan cuáles son las necesidades básicas y luego se procede a clasificar como pobre a una persona que no satisfaga dos o más de esas necesidades. 

Ambos métodos recogen información de las Encuestas Nacionales de Hogares (ENAHO) y presentan subjetividades. Con el método de la pobreza monetaria, ¿cómo determinar los bienes y servicios que conforman la canasta básica? Del mismo modo, de acuerdo con el método de NBI, ¿cómo determinar las necesidades básicas? ¿Por qué a partir de dos de ellas insatisfechas el individuo se considera pobre y no a partir de tres?  

Más aún, los dos métodos parten de información obtenida de encuestas, de ahí que se ubiquen dentro de un grupo denominado “línea de pobreza objetiva”; sin embargo, en los últimos años se ha avanzado en el cálculo de una línea subjetiva que depende de la autopercepción de cada persona.  Bajo esta última definición, es pobre quien se considera como tal, independientemente del nivel de ingresos y otro aspectos relacionados con el bienestar.

Por lo tanto, las líneas de pobreza objetivas dependen de criterios establecidos por especialistas para llevar una vida decente; por ejemplo, las necesidades biológicas de alimentación en términos de requerimientos nutricionales mínimos. Las líneas subjetivas depende más de la idea que cada persona tiene sobre el nivel mínimo de ingreso o consumo necesarios para ni ser pobre.

Existen varios métodos más para calcular la pobreza; de ahí que surjan dos conclusiones: en primer lugar, es necesario complementar los resultados de la pobreza con otros indicadores relacionados con el bienestar; en segundo lugar, el diseño de las políticas sociales se hace a partir de la caracterización de la pobreza, la que a su vez depende del método usado. Y este último punto es clave. 

COMENTARIOS

No hay comentarios.

DEJE SU COMENTARIO

La finalidad de este servicio es sumar valor a las noticias y establecer un contacto más fluido con nuestros lectores. Los comentarios deben acotarse al tema de discusión. Se apreciará la brevedad y claridad.


No se lee? Cambie el texto.


TODOS los blogs


Invirtiendo a futuro

Gino Bettocchi

La era inteligente

Rafael Lemor Ferrand

Doña cata

Rosa Bonilla

Blindspot

Alfonso de los Heros

Construyendo Xperiencias

Rodrigo Fernández de Paredes A.

Diversidad en acción

Pamela Navarro

Sin data no hay paraíso

Carlo Rodriguez

Conexión ESAN

Conexión ESAN

Conexión universitaria

Conexion-universitaria

Café financiero

 Sergio Urday

La pepa de Wall Street

Vania Diez Canseco Rizo Patrón

Comunicación en movimiento

Benjamín Edwards

Zona de disconfort

Alana Visconti

Universo físico y digital

Patricia Goicochea

Desde Columbia

Maria Paz Oliva

Inversión alternativa

James Loveday

Con sentido de propósito

Susy Caballero Jara

Shot de integridad

Carolina Sáenz Llanos

Detrás del branding

Daniela Nicholson

Persona in Centro

Cecilia Flores

Mindset en acción

Víctor Lozano

Marketing de miércoles

Jorge Lazo Arias

Derecho y cultura política

Adrián Simons Pino

VITAMINA ESG

Sheila La Serna

ID: Inteligencia Digital

por Eduardo Solis

Coaching para liderar

Mariana Isasi

El buen lobby

Felipe Gutiérrez

TENGO UNA QUEJA

Debora Delgado

De Pyme a Grande

Hugo Sánchez

Sostenibilidad integrada

Adriana Quirós C.

Gestión de la Gobernanza

Marco Antonio Zaldivar

Marca Personal 360º

Silvia Moreno Gálvez

Creatividad al natural

Andrés Briceño

Mindset de CEO

Carla Olivieri

Clic Digital

IAB Perú

Market-IN

Jose Oropeza

Cuadrando Cuentas

Julia y Luis

Liderazgo con ciencia

Mauricio Bock

Pluma Laboral

Alonso J. Camila

Economía e Integridad

Carlos Bustamante B.

Aprendiendo - nivel CEO

Francisco Pinedo

Portafolio Global

BlackRock

Menos face más book

Rafael Zavala Batlle

Visiones para el desarrollo

CAF –Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe–

Te lo cuento fácil

Alumnos de la Universidad del Pacífico

Fuera de la caja

María Camino

Orquestación Estratégica

Dr. Diego Noreña

Más allá del efectivo

Felipe Rincón

Mujer, ejecutiva y trasgresora

Zendy Manzaneda Cipriani

Disrupcion en la nube

Disrupción en la Nube

Revolución digital

Pablo Bermudez

Economía desde el campus

Grupo Económica

Síntesis legislativa

José Ignacio Beteta Bazán

La parábola del mudo

Javier Dávila Quevedo

Arturo Goga

Arturo Goga

Sumando Valores

Superintendencia del Mercado de Valores

@infraestructura

Rosselló Abogados

Minería 2021

Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP)

Conciencia Corporativa

Verónica Roca Rey

Agenda Legal

Estudio Echecopar

Perspectiva Forestal

Comité Forestal SNI y Comité de Madera e Industria de la Madera ADEX

Pensando laboralmente

César Puntriano

Auditoria del Siglo 21

Karla Barreto

Economía conductual

Bertrand Regader

Cultura financiera

Walter Eyzaguirre

Triple enfoque

Cecilia Rizo Patrón

Gestiona tus Finanzas

Giovanna Prialé Reyes

Segunda opinión

Eduardo Herrera Velarde

Parte de Guerra

Pablo O'Brien

El cine es un espejo

Raúl Ortiz Mory

Ruarte's - Washington Capital

R. Washington Lopez

Atalaya Económica

Manuel Romero Caro

Terapia de Pareja

Luciana Olivares

Próspero Perú

Gladys Triveño

Herejías Económicas

Germán Alarco

Inversión e Infraestructura

Profesor de ESAN Graduate School of Business Sergio Bravo Orellana

Blog Universitario

Blog Universitario

Juegomaniáticos

Juan Pablo Robles

Gestión del Talento

Ricardo Alania Vera

Personas Power

Ana Romero

Millennials

Pamela Romero Wilson

Reglas de Juego

Pierino Stucchi

Humor S.A.

Jaime Herrera

Bitácora bursátil.

Equipo de Análisis de Intéligo SAB

Vivir Seguro

Asociación Peruana de Empresas de Seguros

El deporte de hacer negocios

Luis Carrillo Pinto

Zona de Intercambio

Julio Guadalupe

Innovar o ser cambiado

Andy Garcia Peña

Economía aplicada

Juan Mendoza

El Vino de la Semana

José Bracamonte

Carpeta Gerencial

IE Business School

Desafíos para el progreso

Banco Interamericano de Desarrollo

Diálogo a fondo

Fondo Monetario Internacional

Predio legal

Martín Mejorada

e-strategia

José Kusunoki Gutiérrez

Vinos, piscos y mucho más

Sommelier Giovanni Bisso

Palabra de Gestión

Julio Lira Segura

Impacto ambiental

Lorenzo de la Puente

Inversiones Globales

Carlos Palomino Selem

Moda Inc.

Daniel Trelles

Divina Ejecutiva

Fiorella

Menú Legal

Oscar Sumar

Analizando tus inversiones

Diego Alonso Ruiz

Reformas incompletas

Instituto Peruano de Economía

Empresa&Familia

Pablo Domínguez

Hoy sí atiendo provincias

Félix Villanueva - Aurum Consultoría y Mercado

Smart money

Luis Ramírez

Consumer Psyco

Cristina Quiñones

Gestión de servicios

Otto Regalado Pezúa

Marketing 20/20

Michael Penny

Mercados&Retail

Percy Vigil Vidal

CAFÉ TAIPÁ

Milton Vela

Anuncias, luego existes

Alexander Chiu Werner

Marcas & Mentes

Lizardo Vargas Bianchi

Riesgos Financieros

Gregorio Belaunde

Economía para todos

Carlos Parodi

De regreso a lo básico

Paúl Lira Briceño