Estimado Oscar, te felicito por el post. No sorprende que algunas personas suelan reaccionar intuitivamente. Muchos comentarios parten de la premisa de que el Estado debe hacer algo porque los individuos o no sabemos o no somos responsables. El paternalismo parte de esta idea errada de que el Estado sabe mejor qué es bueno para nosotros y es una idea nefasta que solo puede traer desperdicio a la sociedad en su conjunto. En otros casos, más extremos aun, se aprecian opiniones que no se sustentan en lo técnico. ¿Es que acaso el problema de la gente en extrema pobreza es la comida chatarra? ¿O es que no tienen qué comer? En realidad esta ley de comida chatarra impone costos que reducen las opciones de los consumidores, especialmente, de los más pobres. Tu post asume la tarea más difícil, la de decirle a la gente que hay que ser responsable y no conformista, que hay que fomentar la formación y no la intervención. Es un camino muy incomprendido… pero es el acertado. Nuevamente felicitaciones.

Muy buen sentido del humor pero…….no se debe tomar a la ligera las consecuencias de no regular la comida chatarra, no sabia que en el Perú se ha elevado el indice de obesidad, es peocupante por que trae consigo una serie de consecuencias perjudiciales no solo para la persona sino para el estado mismo y todos, por que la obesidad por ejemplo trae consigo mayores indices de diabetes y si esa persona es asegurada es el estado(todos nosotros) quien asume el costo, ya se ha visto esto en USA y México que son los `paises que actualmente se disputan el primer lugar en obesidad y….no es casualidad que son los paises donde se consume la mayor cantidad de coca cola por persona y tampoco entocnes es casualidad que desde que la coca cola compro la inca cola, se ha elevado el consumo de la coca cola en las nuevas generaciones,. no quiero decir que sea la unica causa pero es un ejemplo del daño que ocasiona las bebidas gaseosas, claro que la educación debe empezar en casa pero en el mundo de la globalización y de la publicidad obviamnente influye lo que se ve asi que yo si creo que se debe regular el consumo y publicidad de la comida chatarra y gaseosas.

Oscar,
No he sabido si reír o llorar. Muy buen post. Comparto tu punto de vista.
Me asombra aún ver cómo no hemos aprendido de las experiencias totalitarias en nuestro país y vecinos…la gente aún quiere que LE DIGAN cómo vivir…eso da miedo.

Si bien son necesarias algunas prohibiciones como bien citas el caso de la bocina y el fumar en lugares públicos, ya que afectan directamente el derecho de los demás.
Los efectos indirectos que pretender sustentar de las iniciativas que citas, son muy complicados de medir y al final nuestros legisladores pueden encontrar miles de absurdas relaciones.

En el caso de la comida chatarra, si el estado gasta tanto en atender a personas con problemas derivados del sobre peso, pues lo que debería de pensarse es en eliminar ciertas coberturas (al igual pasa con los seguros particulares). Cada persona debe ser libre de escoger de qué se enferma o no y de asumir las consecuencias y no distribuirlas pues así es fácil. Falta también mucha más educación, educación y educación.

Ojalá que no prosperen mas IDEOTAS de nuestros otoronguísimos, ilustrados y muy bien educados congresistas.
Felicitaciones.

Oscar, mucha más gente que la que te imaginas: http://peru21.pe/encuesta21/cree-que-peru-como-ha-ocurrido-francia-se-legalizar-matrimonio-gay-163

Apreciado Oscar, cabe en el reino de las probabilidades que un Estado se desentienda de un problema social si es que este se debe (como muchos sino todos) a conductas irresponsables de los individuos?

Una reflexión tranquila nos llevará a negar esa probabilidad: No hay forma de que el Estado no utilice recursos para tratar gente con diabetes, hipertensión, hígados y riñones dañados, arterias y corazones afectados, por la obesidad por supuesto como causa general.

Por eso decir que el Estado no pague es proponer algo irreal.

Pero como en el caso de las bocinas, la obesidad afecta directamente a terceros como la productividad de las empresas.

Las empresas podrían poner barreras a la contratación de obesos sin sufrir el estigma social y las sanciones del Indecopi?

Pero insisto, al fin y al cabo esta discusión no se está enfocando en el verdadero problema que es la acción restrictiva de un Gobierno que no está libre de sospecha.

Definitivamente el proyecto de ley es muy gracioso, pero qué diferente sería el Perú y el mundo si muchas cosas de dicho Proyecto se cumplieran. Claro, hay cosas que pueden sonar estúpidas pero también creo que es necesario que la comida sea regulada, ya que la nutrición es fundamental para la educación y desarrollo de las personas, o ¿porque creen que tenemos futbolistas que no dan para más o congresistas y políticos que no merecen estar donde están? pues tal vez sea porque de niños no se nutrieron correctamente ni ellos ni las personas que votan por ellos.

Definitivamente coincido con otros comentarios sobre que la educación es clave en cualquier tema, en especial, en uno que tiene que ver con la salud de la población y espero que esto también sea prioridad del gobierno y se maneje de manera adecuada.

Todo alimento es perjudicial para la salud si se abusa de su consumo, pero la comida chatarra lo hace en mayor grado por requerirse menores cantidades para producir algún efecto adverso.

Qué debe y qué no debe regular el Estado es una línea muy delgada por ello la controversia.

La obesidad, entre otras enfermedades crónicas, no necesariamente se originan por el consumo de comida chatarra entonces, por ejemplo, si hubiera alguna ley que diga: Nadie puede consumir más de “X” calorías por día de cualquier alimento porque se volvería obesa y esto traería problemas de salud pública a la larga, sería correcta dicha ley o atentaría contra la libertad de cada uno de nosotros?

En mi opinión, para el ejemplo, dicha ley atentaría contra nuestra libertad porque como comenté anteriormente todo alimento puede perjudicar nuestra salud, dependerá de las cantidades consumidas y si alguien puede y quiere consumir en exceso sabiendo de que es perjudicial, es su responsabilidad.

Veo diferente el caso de la “comida chatarra” con respecto a niños y adolescentes, dadas las características particulares de este tipo de alimento y el bajo nivel de educación y cultura de la mayoría de los niños y adolescentes de nuestro país.

Adjunto el link donde podrán encontrar la Ley en discusión: ftp://ftp2.minsa.gob.pe/normaslegales/2013/Ley30021.pdf

Oscar muy creativo tu ley de la felicidad si eso se pudiera conseguir con una ley seria lo ideal, pero debido a que las personas sus distintas y tienen distintos gustos o preferencias no se les puede imponer un estilo de vida mejor dejar que cada cual decida como ser feliz, siempre y cuando no dañe a terceros.

Estimado Óscar; pienso que te quedaste corto en el tema porque ya el “Presidente Ollanta” nos dio sorpresas durante la semana y se nos viene, al parecer, una avalancha de normas contra los contenidos de los medios de comunicación (mucha noticia amarillenta, perjudicial para nuestros niños y adolescentes, según lo manifestó)…asi que….al parecer se nos vienen tiempos turbulentos. Incidentalmente, por un comentario de Bullard, – no se si leyeron lo que escribió o solo en lo obtuvieron de oidas, lo que según me dicen es una sencilla forma de obtener conocimientos -, se le han lanzado con todo en facebook. Saludos

Qué prepotencia la del Grupo Bona Fide!! Seguro en el futuro van a querer obligarnos a usar cinturón de seguridad en las autopistas! No me sorprendería que después salgan con derechos laborales, sueldo mínimo y prohibición del trabajo infantil.

Luego de leer unas lineas de esta nota, que fracasa en su pretencion de ser humoristica, me aburri. Asi que baje hasta donde dice “Volviendo a hablar en serio…” , donde compara las estupideces de los primeros parrafos con “Se van a prohibir los alimentos que contengan grasas trans”. Por si el autor tiene problemas de comprension de lectura, le cuento que se va a eliminar gradualmente esta grasa, que ya ha sido prohibida o por lo menos reducida a niveles minimos en todos los paises desarrollados (y con mayor nivel educativo). Es una grasa artificial, toxica, comprobadamente danina, y sobre eso no hay discusion. Tambien le cuento que en Estados Unidos, los colegios privados (de esos que cuestan $38,000 al an~o) como el National Cathedral School o Sidwell Friends, donde estudian las hijas de Obama, tambien tienen prohibidos los celulares, y ningun padre o madre se queja. En el mundo civilizado mas bien se reirian y ridiculizarian tan patetica nota como la de Oscar Sumar.

OSCAR, ME PARECE ACERTADO QUE ANALICES EL “DURO Y ABNEGADO TRABAJO” DE LOS ACTUALES CONGRESISTAS, EN CLAVE DE ANECDOTA E IRONIA.

COMENTABA LA SEMANA ANTERIOR, CON UN VIEJO AMIGO, CERCA AL MONUMENTO DE VITTORIO EMANUELLE, QUE NO POCOS POLITICOS, SON ABANDERADOS DEL “DOLCE FAR NIENTE”, ES DECIR “DE LA VAGANCIA COMO ESTILO DE VIDA”.

SI NOS PREGUNTAMOS, CON ANIMO CRITICO Y ESCRUTADOR ¿QUE HACEN LOS ACTUALES CONGRESISTAS POR EL PAIS? LA RESPUESTA ES TERRIBLEMENTE DESALENTADORA. LA GRAN MAYORIA DE LOS ACTUALES CONGRESISTAS, NO APORTAN ABSOLUTAMENTE NADA, Y RESULTAN UN LASTRE A LA ECONOMIA DEL ESTADO.

EN REALIDAD, ALGO FUNCIONA MUY MAL, CUANDO UN GRUPO DE INDIVIDUOS, ENARBOLAN LA BANDERA DEL SUELDO FACIL Y LA GOLLORIA DURANTE AÑOS Y NO SON CAPACES DE PRESENTAR Y SUSTENTAR UN SOLO PROYECTO INTERESANTE, CON DEBATE Y REPLICA INCLUIDOS. SON INCAPACES DE PIES A CABEZA.

CUANDO EL CONGRESO SE CONVIERTE EN HUARIDA, LAS COSAS NO VAN BIEN Y ES NECESARIO ABRIR VENTANAS, QUITAR LOS CERROJOS DE LAS PUERTAS, VENTILAR Y FUMIGAR LA SEDE PARLAMENTARIA.

CUANDO A ESTOS SUJETOS, SE LES DENOMINA “PADRES DE LA PATRIA”, NO POCOS DESEARIAMOS SER APATRIDAS. EL COLMO DE LA DESVERGUENZA, TOCA SU TECHO, CUANDO ESTOS INDIVIDUOS SE SIENTEN CON DERECHO A RECLAMAR JUGOSOS AUMENTOS, POR VIATICOS Y GASTOS DE REPRESENTACION… QUE NO PRODUCEN NINGUN BIEN O RESULTADO EN BENEFICIO DEL PAIS.

OSCAR, TERMINO COMO EMPECE, COMENTABA QUE COINCIDI CON UN VIEJO AMIGO Y CERCA AL MONUMENTO DE VITTORIO EMANUELLE, CAIMOS EN LA CUENTA QUE EL 99% DE LA CLASE POLITICA SE ESPECIALIZA EN EL “DOLCE FAR NIENTE”… LA VAGANCIA COMO ESTILO DE VIDA… A COSTA DEL BOLSILLO DE LOS CIUDADANOS, CLARO ESTA.

SALUDOS.

Broder, ya fue. en esta vida hay que saber ganar y perder, tus teorías se quedaron en eso.

jaja Perfecto! Sí leí la semana pasada el proyecto de ley sobre el no uso de celulares en clases porque “influyen con el correcto aprendizaje”, entre otras barbaridades. Lo claro es que la política es lo que es gracias a sus políticos.

Soy un fiel partidario de la propiedad privada y la libre iniciativa, pero no creo en la auto regulación, simplemente por que en nuestro mundo real ésta no funciona.

Debemos reconocer que así como hay congresistas ineptos y venales, también hay industriales, comerciantes y publicistas invadidos por un afán de lucro intemperante y frenético.

El señor Sumar (se nota al final del artículo cuando se queja de la regulación del matrimonio, la AOE y la publicidad sexual) defiende en realidad una libertad mal entendida, sin límites ni contrapesos.

Ya es mucho alarde, me parece. Sabe que a los promotores les falta ingenio para responderle igual.

Lo peor es es que son en su mayoria abogados tradicionalistas que no sé que pintan en Derecho del Consumo. He hecho una Tesis del Tema y en mi investigación no les he encontrado aporte académico alguno.

Su formación es casuistica y practica no les permite ver el problema sistémico de sus propuestas. Pero creo también que si los detractores conocieran personalmente los casos concretos serían menos insensibles y más fléxibles a su lema de “El mercado lo puede todo”. Nuestra situación actual tampoco da para burlas.

No comparto el post, me parece poco profesional; yo estoy de acuerdo con la regulación de la comida chatarra por que los niños son muy propensos a ser influenciados por la televisión y afiches publicitarios.

Por mas que no comparto su opinión la respeto.

Saludos

Apreciado Oscar, muy larga la broma lo cual hace perder parte de su efectividad. La cuestión de fondo sería que el Estado no debe meterse en las decisiones personales que sólo atañen a las personas involucradas. En eso totalmente de acuerdo.

La tendencia es a pensar que el tema de comer chatarra se trata de decisiones personales, pero la imbecilidad de tocar bocina (en el 99.999999% de los casos) también es una decisión personal, sin embargo está multada (independientemente que esta atribución de la autoridad se cumpla o no).

Entonces, cuándo una decisión personal es realmente personal? es decir que sólo afecta a la persona que la toma y eventualmente sólo a su entorno más cercano?

La creciente obesidad de la población está o no está relacionada con el consumo de comida chatarra? la obesidad es un problema de salud pública? que conlleva consecuencias para la población no obesa?

Entonces, el Estado debe intervenir en problemas de salud pública? anticiparse si se quiere a que se convierta en una tema de salud pública?

Yo creo que sí. Por lo que el problema de fondo NO es como planteamos al principio para retar al lector, si el Estado debe o no intervenir en las decisiones personales, porque la respuesta es claramente positiva cuando las decisiones personales tienen un carácter perjudicial de magnitud social, pues no sólo afectan a los directamente involucrados, como cuando los imbéciles (habitantes del país Imbecilandia) tocan bocina.

El problema entonces es qué Estado es el que interviene.

Si el Estado es la alcaldía de Nueva York o el gobierno de Piñera en Chile, las decisiones normativas aunque molesten a un sector, no son vistas como una amenaza general. Pero si lo hace un Gobierno que se manifiesta favorable a regímenes como los del finado Hugo Chávez, que se arregla con UNASUR para sostener a un gobierno comunista, que tiene aspiraciones de empresario refinador de petróleo y grifero, que se manifiesta reeleccionista con arabesco lateral, que despierta sospechas de persecutor de opositores, entonces es natural alarmarse y rechazar las “intromisiones” en la vida privada de las personas, aunque en realidad no sea tan privada si enfrentar las consecuencias de engordar demasiado, será a la larga una carga para el presupuesto estatal de salud y para la productividad de las empresas.

En consecuencia, apoyo la protesta, pero no se debe vender comida chatarra en las escuelas ni publicitarla de manera libérrima, Y las escuelas deben promover la práctica de deportes además de educar sobre prácticas apropiadas de alimentación.

Por otro lado, no hay que chocar con la comida peruana, porque en todos los siglos anteriores a la aparición de los productos chatarra, no generó obesidad masiva…

Excelente post, Oscar. Me parece muy interesante la forma tan didáctica en la que abordas un tema de nuestra realidad.

Saludos

Estimado Oscar; gracias por alegrarnos el día con un poquito de sarcasmo. Lo que noto es que algunos comentarios provienen de la gente más seria del mundo. Eso si, que no se le pase la mano con el sarcasmo porque lo ponen en la lista negra y lo deportan a Venezuela, (¿o preferriría Bolivia?), país en el que podría recibir los correctivos que se merece.

No he sabido si reír o llorar. Muy buen post. Comparto tu punto de vista.
Me asombra aún ver cómo no hemos aprendido de las experiencias totalitarias en nuestro país y vecinos…la gente aún quiere que LE DIGAN cómo vivir…eso da miedo.

Si bien son necesarias algunas prohibiciones como bien citas el caso de la bocina y el fumar en lugares públicos, ya que afectan directamente el derecho de los demás.
Los efectos indirectos que pretender sustentar de las iniciativas que citas, son muy complicados de medir y al final nuestros legisladores pueden encontrar miles de absurdas relaciones.

En el caso de la comida chatarra, si el estado gasta tanto en atender a personas con problemas derivados del sobre peso, pues lo que debería de pensarse es en eliminar ciertas coberturas (al igual pasa con los seguros particulares). Cada persona debe ser libre de escoger de qué se enferma o no y de asumir las consecuencias y no distribuirlas pues así es fácil. Falta también mucha más educación, educación y educación.

Ojalá que no prosperen mas IDEOTAS de nuestros otoronguísimos, ilustrados y muy bien educados congresistas.
Felicitaciones.

Estimado Oscar:

Con un estilo sarcástico, has podido hacernos reflexionar sobre las absurdas leyes y obtusa forma de legislar.

Me he quedado con ganas de leer las Disposiciones Finales Transitorias. Creo que ha quedado para la imaginación.

Mis felicitaciones por el post.

Saludos.

Estoy de acuerdo que se regule la comida chatarra, gran parte de la población desconoce los prost y contra del consumo de comidad industrializada, si la forma es regular pues hay que hacerlo, por si no te has dado cuenta no todos gran parte de la población vive en extrema pobreza y por lo tanto carece de educación superior, asi que un poco mas de analisis al respecto, deberias conocer un poco mas el interior del pais y ver la cruda realidad.

Estimado Oscar:

Buen post, no es necesario ser tan serio para poder trasmitir opiniones, de acuerdo con el uso del sarcasmo y humor, en respuesta al usuario Felipe sobre uso del cinturón es dividido y la información deberías otorgarle en español, no en inglés, por respeto a tus lectores.

Asimismo, estoy de acuerdo que la Ley de la comida chatarra es una ley banal en torno a la salud y nutrición infantil, sería interesante si pudieses escribir acerca del proyecto de ley para la regulación de Acreditación de las Universidades por el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad de la Educación (Sineace) o la Ley del Servicio Civil.

Saludos

Que lastima Oscar que recurras al sarcasmo cuando pretendes defender una posicion chueca que no se sustenta en argumentos validos, en principio es perfectamente valido que el Estado se preocupe de la alimentacion de la poblacion, asi como se preocupo del tema de los cigarrillos, si queremos vivir en sociedad tenemos que respetar las limitaciones a la libertad que nos impone esta situacion.
No tenemos la libertad de dar de comer a nuestros hijos lo que nos de la gana, no tenemos derecho a ello, al contrario debemos protegerlos
Tampoco de hacernos daño a nosotros mismos si con eso generamos un costo a la sociedad
Si quieres tener total libertad entonces vive fuera de la sociedad asi tus actos no nos costaran a todos.
Los mayores costos que implican una mala alimentacion tienen que ver con la seguridad publica, el seguro social, los seguros privados al subir la siniestralidad.
Para mayor ejemplo mira lo que pasa en USA con el tema de los obesos mira el video “El Peso de una Nacion” en YOUTUBE.
Finalmente, creo que hace daño al pais desprestigiar a sus autoridades, hay canales para eso o en todo caso participa en politica y trata de cambiar las cosas democraticamente.
Generalmente leo tus articulos y en mucho estoy de acuerdo con tus apreciaciones pero este ultimo es verdaderamente decepcionante, espero que pongas mas analisis a tus opiniones.
saludos

Aqui un texto que escribí:

EL CABALLERO, DON DINERO

Ley de Alimentación Saludable

En mis años de estudios secundarios, mis compañeros de promoción y yo, antes del inicio de clases en la mañana y conforme íbamos llegando nos reuníamos en la esquina que hace la avenida Diagonal con la calle San Ramón, que ahora llamamos la calle de las pizzas en Miraflores. A unos metros de allí había una tiendita pequeña donde inicialmente, solo los más osados de la promoción compraban cigarrillos, pero poco a poco prácticamente todos alguna vez compramos allí cigarrillos, también yo lo hice una vez pero solo di unas pitadas y no me gusto y lo regalé a un compañero, muchos le tomaron el gusto y algunos ya no lo pudieron dejar a pesar de la difusión y propaganda acerca del daño que hacía.
En los últimos años, lamentablemente por los efectos que empezaron a sentir, muchos con bastante esfuerzo y con la salud algo deteriorada, han podido controlar o superar el deseo de fumar ayudados por el consejo de sus médicos y por las campañas anti tabáquicas y de prohibición que ha desarrollado el gobierno como respuesta a la inocultable evidencia de los estragos que el hábito de fumar hace a las personas. Así se han tomado medidas cada vez mas vigorosas para reducir en la población esta costumbre tan dañina, algunas medidas que se han tomado son las siguientes:

1.- Elevar los tributos que graban el producto
2.- Retirar la propaganda de las tabacaleras
3.- Prohibir la venta a menores de edad
4.- Prohibir fumar en lugares públicos
5.- Obligar a los productores a colocar la advertencia de “FUMAR
ES DAÑINO PARA LA SALUD”
6.- Obligar a los productores a colocar espantosas imágenes de
personas afectadas por los efectos del tabaco.
7.- Se promueven campañas para dejar de fumar a nivel público y
privado
8.- Se han desarrollado métodos e ingeniosos artículos para dejar de
fumar como los parches y pastillas de nicotina, los cigarrillos
electrónicos, tratamientos hipnóticos, láser y hasta operaciones.

A pesar del gran esfuerzo y voluntad desplegada hay aun muchísima gente que sigue fumando e incluso mucha gente joven inicia su aventura de vida con un cigarrillo en la mano.

La campaña desplegada se enfrentó siempre a la oposición de las grandes fábricas y empresas del tabaco que hasta ahora hacen un gran negocio envenenando a la gente, uno de los argumentos más recurridos es siempre el tema de la libertad, era de esperar que así sucediera, pero debemos tener claro que lo que les importa a estos grandes negocios no es la LIBERTAD de las personas sino su propio beneficio, el daño a la población no les importa, son capaces de comprar voluntades en las más altas esferas de los gobiernos y malograr funcionarios con lobbies y prebendas escandalosas con tal de mantener su negocio, esta es la historia, la hemos vivido no es un cuento y también la sufrimos cuando un familiar, un amigo o un prójimo cualquiera sufre las consecuencias de este nefasto concepto de considerar el mercado sin control como el mejor asignador de recursos y promotor del desarrollo humano.

Hasta aquí, querido lector, estará más o menos de acuerdo conmigo que las acciones realizadas eran y son necesarias para que el Estado proteja a la población de los mezquinos intereses de los negocios que manipulan o presionan para mantener sus intereses a pesar del daño que hacen a la población.

Ahora pregunto, ¿no es acaso legítimo que el estado promueva una alimentación más sana en la población y pueda al menos limitar los efectos de la publicidad de productos de dañan la salud?

¿Acaso no están los grandes negocios haciendo sus lobbies en el congreso para derogar esta última ley.

¿No está acaso la mayoría de los medios, coludidos con estos grandes negocios que compran publicidad, sacando temas contra la ley para formar una opinión que favorezca su derogatoria?.

¿No es que los excesos de sal, azúcar, alimentos con grasas trans, saturadas o hidrogenadas, colorantes, preservantes y otros insumos químicos son dañinos para la salud?

¿No es acaso cierto que uno de los factores que estimula la epidemia brutal de Hipertensión, Dislipidemia, Diabetes y otros males es la mala alimentación?

¿No es acaso uno de los roles del Estado ocuparse de estos temas, creemos acaso que el mercado y la auto regulación van a resolver este tema? Por favor no seamos ilusos, que la historia del cigarrillo no se repita.

Jorge Ayllón

Estimado Óscar. Felicitaciones por el post. Definitivamente, la propuesta legislativa que realizas se suma a las últimas que el Congreso ha estado emitiendo.

Si comenzamos a prohibir más cosas a la gente, de repente podremos ser más “útiles” económicamente, pero definitivamente no más felices.

La regulación no es mala en sí, el problema se presenta cuando se regula una situación, sin que se necesite hacerlo. Así, la regulación solo es pertinente, cuando a través de una regla, se mejora la situación de las personas y, por ende, son más felices.

Si no me gustan las ensaladas y me gustan las hamburguesas, voy a ser infeliz si me obligan a comer ensaladas y me prohíben las hamburguesas.

Si me gusta fumar cigarrillos y soy feliz fumando, aunque tenga menos años de vida a la larga, seré infeliz si me prohíben fumar.

Si soy congresista y me descuentan mi sueldo si no sustento adecuadamente las leyes o propongo leyes deficientes, entonces sería infeliz.

De repente, la Ley de la Felicidad debería contener un artículo que prohíba a los congresistas proponer leyes sin sustento adecuado y con tan pobre análisis costo- beneficio. Además, debería haber una comisión que los sancione. De esa manera, tendríamos leyes mejores y más eficientes que resuelvan verdaderos problemas y así todos seríamos más felices.

Estimado Oscar,

Felicito que toque estos puntos al margen de si fue la mejor forma o no de hacerlo.

En general, veo un par de preguntas que saltan a la vista: Qué debería regular el Estado en una “economía de libre mercado” y cómo debería hacerlo en favor de las grandes mayorías.

Específicamente para el caso de la comida “chatarra”, es correcto afirmar que dicha comida pueda generar problemas en salud de la población como obesidad, problemas cardiacos, etc. por lo que desde esa perspectiva sería comprensible que el Estado se interese por el tema.

El punto es si la “forma” en que interviene el Estado es la correcta o no, en este contexto si importa las formas, más aun teniendo en cuenta la creciente sospecha de que sigamos la línea de nuestros vecinos Venezolanos, Ecuatorianos, Bolivianos y Argentinos.

Habría que tener en cuenta que existen productos alimenticios que se comercializan legalmente en nuestro país que contienen al menos un componente que se encuentra prohibido en países mas desarrollados por ser considerados perjudiciales para la salud de su población.

Deberíamos todos como parte de nuestra cultura conocer qué producto y en qué cantidad es saludable y cuál no lo es, de hecho que nos sería muy útil.
Debería el Estado facilitar a la población el conocimiento de lo que es saludable y lo que no lo es, pienso que es su obligación.
Debería el Estado incentivar y promover el consumo de productos saludables en su población, en mi opinión tendría que hacerlo.

Si considero, por razones obvias, que productos que a todas luces contengan al menos un componente perjudicial para la salud estén prohibidos de ser comercializados en territorio nacional. Y en caso de que sólo hubieran indicios de que sean perjudiciales para la salud tener en cuenta el principio de precaución empleado en el contexto medioambiental.

El problema de fondo es la mala educacion en el hogar y en los colegios. Si los padres educaran a sus hijos y si los colegios enseñaran cursos de educacion civica, no se necesitaria actuar en forma autoritaria con la poblacion. Es absurdo hacer comparaciones entre realidades tan diferentes como la de EEUU, Lima y la serrania Peruana. Falta aprender el significado de respeto.