Los influencers han evolucionado. Desde hace más de 10 años, los antiguamente llamados “bloggers”, ahora tienen una comunidad ganada y una programación estructura para poder seguir ganando y manteniendo a sus seguidores, pero ¿cuáles son los nuevos retos con los que se enfrentan? Acompáñenme para ver las diferentes situaciones y desafíos que encaran en una nueva era digital.
Según Ramos, J. (2019), un influencer es toda aquella persona que tiene un fiel séquito de seguidores en las principales redes sociales y también dichos seguidores difunden mensajes al influencer. Su labor es la de transmitir sinceridad, naturalidad y cercanía a sus seguidores. Ellos transmiten mayor confianza que una marca ya que percibe su opinión como mucho más objetiva, evitando así el riesgo de caer en la publicidad engañosa. No en vano, la influencia social es uno de los motivadores más poderosos a la hora de consumir.
Dicho esto, para que una marca o seguidor pueda tenerle confianza a su influencer es la manera cómo comunica sus opiniones, que sea confiable, coherente y sobre todo honesto con sus seguidores. Lo que más pesa en seguir a alguna persona actualmente es la sinceridad. Atrás dejamos los días en que un influencer podía decirnos diversas cosas, pero no era coherente con el tiempo y había muchas diferencias entre lo que hacía y decía. Además de esto, las métricas como el engagement, el alcance, la rentabilidad, entre otras cosas más son cruciales para que una campaña realmente tenga resultados.
Las agencias de relaciones públicas se fijan mucho en las métricas anteriormente dichas, ya que desean que su campaña tenga los resultados esperados y tener éxito con ellas (sea cual sea su público). Los influencers de moda por otro lado, son parte principal de poder transmitir una apertura socio cultural, esto es, estar abierto a comunicar perfiles inclusivos. Con esto me refiero a tocar y exhibir temas como los estereotipos, la inclusión, la diversidad, etc. Esto es como parte del pilar de la sinceridad para poder conectar fácilmente con sus seguidores.
La moda puede llegar a ser muy fría, y la época de “El diablo viste a la moda” es ya un mito. Es por ello la crisis de las revistas y editorial en el mundo entero. El concepto de “It’s a private party” de Carolina Herrera por ejemplo ya no es vigente en la actualidad. No obstante, el papel de los influencers es conectar y ser cercano con su público porque es con quienes conviven a diario y por su apoyo tienen el éxito que se merecen.
¿Y tu qué opinas de los influencers en estos días?
Referencias:
Ramos, J. (2019). Marketing de influencers. XinXii.
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