Antes de visitar un destino, uno de los factores más importantes que evalúan los viajeros es la hospitalidad del lugar y la amabilidad que se muestra hacia el turista. Estos elementos, con frecuencia, determinan si una persona tendrá una experiencia agradable o lamentable. Desde las ciudades que respetan a los peatones, el buen trato que hay hacia el extranjero, el empeño que existe en tratarse de comunicarse a pesar de las diferencias del idioma o hasta los destinos que reciben cordialmente a los viajeros LGBTQ+. 

Esta clase de destinos reciben el nombre de ‘tourist friendly’ y cada vez ganan mayor relevancia. ¿La razón? Hay diversos lugares alrededor del mundo que hacen noticia por el rechazo hacia el turista. Por ejemplo, recientemente, en Las Palmas de Gran Canaria, en España, aparecieron pintas en diversos barrios contra turistas y nómadas digitales, además de tener carteles con información falsa para espantar visitantes foráneos. Esto también ha ocurrido en Barcelona y Mallorca.

De acuerdo con el portal turístico TheTravel.com, los 8 países más ‘tourist friendly’ en el mundo son:

1. Islandia
2. Nueva Zelanda
3. Canadá
4. Las Filipinas
5. Portugal
6. Italia
7. Australia
8. Estados Unidos

Si bien esta lista es debatible, y hay diversos portales especializados que también realizan ránkings similares (US Today tiene a Austria, España, Estados Unidos, Portugal, Croacia, Suiza, Reino Unido y Australia, dentro de los mejores 8 países), el tema relevante es que Perú no aparece en estas listas y tiene el potencial de hacerlo por la calidez de su gente y los diversos atractivos turísticos que tiene, tanto por su diversidad geográfica, multiculturalidad, gastronomía y opciones de entretenimiento que tienen un precio asequible a diferencia de otros destinos.

Para que nuestro país pueda destacar como ‘tourist friendly’ y se abra paso es importante que se pueda trabajar en los siguientes puntos:

• Orientación hacia un servicio de excelencia al cliente:

La reputación positiva de cualquier destino turístico depende en gran medida de la calidad del servicio al cliente, y Perú no es una excepción. Para garantizar que cada visitante tenga una experiencia memorable, es fundamental invertir de manera significativa en la capacitación del personal turístico en cada punto de contacto: aeropuertos, hoteles, tours, restaurantes, etc. Así, por ejemplo, los guías turísticos deben manejar el storytelling para atrapar con sus historias y no limitarse a transmitir una información que ya se encuentra en Internet, mientras que el personal de atención de los restaurantes debe también conocer la historia y preparación de los platos y bebidas más representativas, para que la elección de los platillos sea entretenida y despierte curiosidad por probar más de una opción.

Ahora, esta capacitación del personal debe centrarse en la empatía y la comunicación efectiva, así como en la eficiencia y el conocimiento técnico. Por ejemplo, los guías turísticos deben ir más allá de proporcionar información histórica y conectarse emocionalmente con los visitantes, compartiendo anécdotas locales y respondiendo entusiastamente a las preguntas. Enseñar otros idiomas, especialmente los que hablan los turistas, también puede mejorar significativamente la comunicación y la comprensión mutua.

Por otro lado, para garantizar que el personal esté preparado para abordar cualquier inconveniente con profesionalismo y cortesía, la capacitación en el ámbito hotelero debe incluir la gestión de situaciones y la resolución de problemas. El establecimiento de estándares de servicio al cliente y la recopilación de comentarios constantes de los turistas pueden ser herramientas útiles para evaluar y mejorar continuamente la calidad del servicio.

Para que los visitantes se sientan bien recibidos y apreciados durante su estadía en Perú, es fundamental fomentar un enfoque cálido y hospitalario. El personal puede cambiar la percepción general del país con una sonrisa sincera y una actitud amable. Los gestos pequeños, como brindar más información sobre los eventos locales, sugerir lugares especiales o simplemente preguntar sobre la rutina del visitante, pueden crear conexiones emocionales que perduran mucho después de que los visitantes regresen a sus hogares.

Otro aspecto por considerar es que la calidad del servicio al cliente tiene un impacto significativo en la satisfacción inmediata del turista y en la generación de recomendaciones positivas. Los clientes que reciben un servicio excepcional tienen más probabilidades de compartir sus comentarios positivos a través del boca a oído y en plataformas de reseñas en línea. Esta publicidad positiva tiene el potencial de atraer a más visitantes y mejorar la reputación de Perú como un destino turístico acogedor y amigable.

• Un destino integrado digitalmente

La incorporación efectiva de la tecnología en la experiencia turística es esencial para mantener la relevancia y la competitividad de Perú como destino turístico en un mundo cada vez más interconectado. Aprovechar la tecnología mejora la vida moderna de los visitantes y mejora la gestión y la promoción de los recursos turísticos del país.

Proporcionar información detallada en línea sobre destinos turísticos, servicios y eventos es una estrategia fundamental. Las plataformas web interactivas y fáciles de navegar que ofrecen información actualizada sobre atracciones, horarios, tarifas y eventos culturales permiten a los turistas planificar sus itinerarios de manera más efectiva. Las imágenes de alta calidad, los mapas digitales y las descripciones detalladas pueden ayudar a los visitantes a tener una comprensión completa de lo que pueden esperar, lo que aumenta la participación y la anticipación. Esto debe ser implementado en los portales oficiales del país, como ¿Y tú qué planes?, Perú Travel, entre otros. Y se podría implementar una oficina oficial que brinde servicios de asesoría para aquellos operadores que desean mejorar sus webs, pero no tienen las herramientas para lograrlo, tanto en recursos como creatividad. El gobierno debe de trabajar de la mano con el sector privado para que se proyecte una mejor imagen del país a través de la tecnología.

Por otro lado, la promoción de la conectividad Wi-Fi en áreas turísticas y urbanas es crucial en la era de la información. Los visitantes dependen cada vez más de sus dispositivos móviles para obtener información rápida, compartir experiencias en redes sociales y mantenerse en contacto con sus seres queridos. En lugares estratégicos, como plazas principales, museos y sitios históricos, ofrecer Wi-Fi gratuito mejora significativamente la experiencia del turista y su capacidad para explorar y disfrutar de Perú de manera más independiente.

• Experiencia cultural auténtica:

La experiencia turística se basa en la autenticidad cultural, y Perú, con su extensa herencia histórica y multiculturalidad, tiene la capacidad de brindar a los visitantes una inmersión única en la vida cotidiana peruana. El país debe implementar estrategias que vayan más allá de la promoción de los destinos turísticos convencionales y se adentren en la riqueza de sus tradiciones locales para transformarse en un destino líder en experiencias culturales auténticas. Aquí también debe velarse por evitar estafas vinculadas a la venta de artículos o experiencias que no son verídicas, que solo buscan engañar a los turistas.

La realización de eventos culturales a lo largo del año puede mejorar la experiencia de los turistas además de promover festividades como carnavales o fiestas patronales. Se pueden utilizar conciertos de música folklórica, representaciones teatrales y exhibiciones de arte local para resaltar la creatividad y la expresión artística del pueblo peruano. Estos eventos no solo ofrecen entretenimiento, sino que también brindan a los visitantes la oportunidad de interactuar con artistas y artesanos locales, lo que les ayuda a comprender mejor la cultura peruana.

Participar en actividades tradicionales puede ser crucial para una experiencia más inmersiva. Ofrecer a los turistas la posibilidad de aprender y participar en actividades como la preparación de platos típicos, la artesanía local o la danza tradicional permite una conexión más directa con la cultura. Esto no solo enseña habilidades y conocimientos prácticos a los visitantes, sino que también fomenta el respeto mutuo y la apreciación por las tradiciones y formas de vida locales.

Finalmente, la autenticidad cultural va más allá de lo visual y lo palpable; también es una cuestión de interacción y comprensión mutua entre los turistas y la población local. Fomentar la participación activa de la comunidad en la creación y desarrollo de experiencias culturales puede garantizar que estas experiencias reflejen con precisión las tradiciones y valores locales. Esto no solo atrae a los visitantes, sino que también ayuda a las comunidades a desarrollarse de manera sostenible, genera ingresos y promueve la preservación de las prácticas culturales.

A manera de conclusión general, hacer de Perú un lugar atractivo para los turistas requiere un enfoque integral que incluya desde la experiencia de excelencia centrada en el cliente, la tecnología y la autenticidad. Al implementar estrategias efectivas en estos puntos, Perú puede atraer a más turistas internacionales, o en un primer momento despertar el interés por visitar el país, y asegurarse de que cada visitante se lleve consigo recuerdos positivos, lo que tendrá un impacto sostenible en la industria del turismo del país.