Hace algunos años conocí en un trabajo a una mujer maravillosa que desborda alegría, entusiasmo, su energía es incansable y tiene un carisma admirable. Ella es hoy en día una gran amiga que además fue mi cliente, una de las primeras personas que apostó por impulsar su carrera permitiéndome acompañarla en este camino. Así que además de hacer una profunda exploración de autoconocimiento con ella y reconocer sus características, capacidades, habilidades y otros elementos diferenciales de marca personal, tenía la ventaja de saber cómo brillaba ella en cada área de su vida.

Todo estaba bien, hasta que llegamos al momento del CV.

Quedé absorta. Pensaba,

¿Cómo es posible que este currículum no refleje todo lo grandiosa que ella es?

Comenzamos entonces por lo primero: Definimos el objetivo de su marca personal, su identidad de cara al mercado que estaba postulando y en base a ello redactamos las funciones, logros y palabras clave de su CV de manera que fuera fácil para los reclutadores reconocer su propuesta de valor.

El siguiente paso fue resolver el inconveniente con la fotografía que opacaba completamente su brillo y definitivamente no comunicaba los valores de su marca personal. Es cierto, en muchos países ya la fotografía en el CV no se usa, en empresas que tienen sistemas ATS de filtros de reclutamiento automatizado tampoco es algo que vaya a marcar la diferencia. Pero en el caso de ella y en aquella época sí lo estábamos considerando.

Es así que como parte del servicio realizamos un asesoramiento de imagen ejecutiva identificando su estilo de vida, estilo profesional, su paleta de colores, haciendo un reconocimiento de su figura y trabajando en el servicio de fondo de armario es que similar a lo que realiza Marie Kondo – pero con la finalidad de definir prendas esenciales, las que funcionan, prendas que deben ser arregladas (tallas, bastas, fallas) y prendas que definitivamente no funcionan. El objetivo es lograr un guardarropa efectivo. Este momento en la asesoría de imagen es una experiencia muy refrescante y renovadora tanto para ella como cliente como para mi como consultora de imagen, ya que por mi empatía puedo vivir la experiencia con la misma intensidad que ella lo vive. Las emociones se contagian.

Como cierre, pasamos al servicio de personal shopper en la que pude orientarla en las prendas que compró para renovar su armario y asegurarme de que fueran de los colores que habíamos definido que iban perfecto con ella y con las combinaciones que calzaran muy bien con su figura, su estilo y meta profesional.

Una vez que tuvimos las prendas definidas, el siguiente paso fue preparar la sesión de fotografía de perfil profesional. Por supuesto, de la mano de una experta en este servicio.
Este momento es clave y requiere de toda una producción, particularmente si la cliente es mujer, ya que en la imagen personal ponemos énfasis en las prendas, accesorios y combinaciones, también en el cuidado personal, gesticulación, lenguaje no verbal, el espacio donde se realizará la sesión. Elementos como el corte de cabello, el peinado, las uñas, los zapatos, las joyas, el maquillaje son importantes; y si hablamos del lado técnico, también es importante cuidar la iluminación, el fondo de la fotografía, los encuadres, la edición ¡Es toda una experiencia y una inversión que vale la pena hacer!

Cuando tuvimos los resultados quedé satisfecha y entusiasmada, feliz de ver cómo lucía mi cliente y amiga, lista para salir a brillar. Ahora sí teníamos un CV y una imagen que comunicaba realmente los valores de su marca, que además la potenció en sus entrevistas y en su perfil de LinkedIn, punto aparte de los halagos que recibió en sus redes sociales.

Hoy en día ella ha crecido maravillosamente en dos instituciones importantes de su rubro, lo que se ve reflejado en las oportunidades profesionales que ha recibido, en sus ingresos, pero también en la increíble contribución que estoy segura está logrando en las personas con las que trabaja.

Si eres un profesional que busca crecer en una empresa, tu imagen personal es clave
Tu imagen comunica muchos valores, como por ejemplo: profesionalismo, credibilidad, liderazgo, detalle, creatividad, confiabilidad… en definitiva suma puntos para obtener oportunidades de crecimiento profesional y posicionarte como referente en tu entorno profesional.

La imagen personal implica:

• -Saber elegir y combinar prendas y accesorios de acuerdo al tipo de cuerpo y rostro.
• -Usar la psicología del color a tu favor.
• -Tener en cuenta el cuidado personal: cabello, manos, huella sensorial.
• -Ser consciente de gestos, posturas, lenguaje corporal.
• -Reflejar comportamientos, modales, códigos, actitud.

La asesoría de imagen se manifiesta en las plataformas de empleabilidad como por ejemplo CV, LinkedIn, e-portafolios y otros momentos clave como entrevistas, flyers de webinars o ponencias, redes sociales, comunicación vía whatsapp, etc. Suma puntos también al cambiar de trabajo y refrescar la imagen profesional para ese nuevo rol. La imagen personal también potencia a un nuevo líder cuando éste es ascendido a jefe de área o a gerente de área, cada prenda, accesorio, elemento de cuidado personal es clave para proyectar los valores de la marca personal expandida.

Para darte un poco más de claridad acerca de cómo en el día a día una adecuada gestión de la imagen en el contexto profesional es clave, te pido que imagines a una persona que trabaja largas horas por el compromiso que tiene con su empresa, tiene las habilidades, la experiencia, los estudios, la mejor calificación en su evaluación por desempeño y está buscando un ascenso en un área financiera. Ahora supongamos que en su empresa no hay un código de vestimenta definido y esta persona se presenta en la oficina con una vestimenta informal como zapatillas deportivas, pantalones jeans o con una cómoda polera de buzo. Si además le sumamos que su aspecto no luce prolijo, ¿cómo la empresa podría confiarle el orden y planificación contable o financiera si lo que refleja es que no ha logrado gestionarse a sí mismo?

Y si nos colocamos en un contexto diferente, en donde en una agencia publicitaria una persona se presenta con un estilo muy formal, en terno, colores neutros u opacos, con un maletín con mucha estructura, entonces podríamos concluir que su imagen no está reflejando los valores que se esperan para dicha oportunidad profesional como podrían ser creatividad, mente abierta, libertad, innovación. Entonces nuevamente la imagen está jugando en contra.

Por eso hoy te invito a hacer una breve reflexión importante sobre ti mismo y tu imagen personal.
Responde a las preguntas:

• - ¿Tu imagen actual te ayuda a cumplir tus objetivos personales y profesionales?
• - ¿Cómo quisieras que te vean?, ¿qué te gustaría reflejar?
• - ¿Qué es lo más importante para ti de esto que buscas con tu imagen?

Espero que este corto pero importante diagnóstico con preguntas poderosas de coaching te puedan ayudar a expandir tus ideas y vestir con propósito para impulsar tu carrera este 2023.

♥ Agrego que la asesoría de imagen es una carrera de mucha gratificación personal, ya que cuando trabajamos junto con nuestros clientes y vemos el resultado final que potencia y empodera a la persona impactando muy positivamente en su autoconcepto, en refrescar y actualizar su imagen y en su crecimiento personal y profesional, nos conecta con un propósito muy especial.

Hasta la próxima entrada.

¿Cuál es el código de vestimenta que te empodera de acuerdo a tus actividades?